GRACIAS por TODO
Den gracias a Dios por todo, porque esto es lo que él quiere de ustedes como creyentes en Cristo Jesús. 1 Tes. 5:18
Si hay un verso de la Biblia que siempre me deja pensando es éste, simplemente porque el hecho de dar GRACIAS en TODO resulta un tanto difícil, y es que la palabra TODO abarca lo bueno y lo malo, lo que nos hace felices, pero también lo que no, y es que es tan fácil agradecer cuando nos pasa algo bueno, cuando todo son buenas noticias y todo es positivo, pero cuando nos llega un momento difícil lo primero que queremos hacer es salir corriendo y evitar a como dé lugar la situación, esto es lo más normal del mundo, pues a nadie le gusta que le pasen cosas malas ni mucho menos atravesar por momentos de tristeza, pero es verdaderamente necesario que a veces experimentemos tanto cosas buenas como también las malas, porque en la alegría nuestro corazón se goza, pero en la tristeza crece nuestra comunicación con Dios y se fortalece nuestra fé, se dice fácil, pero en realidad es tan difícil cumplir con esta voluntad de Dios que lo único que podemos hacer es pedirle ayuda para poder cumplir su deseo aún en los momentos duros de la vida.
En estos días, ya casi al final del año, la mayoría de las personas habla sobre los propósitos que cumplió este año y las metas que se fijará para el próximo, pero ¿Qué hay de los propósitos no cumplidos?, ¿Qué pasa con las cosas que no conseguimos lograr? A lo largo de un año pasan cosas agradables y positivas normalmente se las agradecemos a Dios de inmediato y nos sentimos tan contentos que para nada es difícil agradecerle tantas veces como nos es posible, pero dejamos de lado “lo malo” y ese tema no queremos ni tocarlo, olvidando que” todo nos ayuda para bien” y es que Dios en ningún momento haría o dejaría que pasara algo que nos dañe, pero si de algo estamos seguros es que SIEMPRE serán por nuestro bien.
Dios ha estado contigo de Enero a Diciembre, las 24 horas del día, en las alegrías y aún más en las tristezas, en el instante en que una persona que llegó a tu vida y en cada uno de las que viste partir, en tus triunfos y en tus sentimientos de derrota, viendo cada una de tus sonrisas y secando cada una de tus lágrimas, ¿Por qué no agradecerle por esos momentos?
Sin lugar a duda en todo tiempo Dios ha estado a nuestro lado, fiel como siempre, con los brazos abiertos nos rodeó con alegría, los mimos que nos dieron ese cálido abrazo en las difíciles circunstancias, mostrándonos que no todo lo negativo es malo, sino que hay cosas que simplemente no nos fueron convenientes o no eran tan buenas como pensábamos en su momento.
Ante cada acontecimiento de este año solo queda decir:
“Gracias Dios porque en todo tiempo nos permitiste sentir tu compañía sin importar cuál fue la circunstancia, buena o mala permaneciste cerca, gracias por las personas que trajiste a nuestra vida, y gracias por las que te llevaste de nuestro lado, gracias por cada alegría y gracias también porque en la tristeza tu amor sanó nuestro corazón, gracias por llevarnos de la mano en cada victoria y mostrarnos el camino en medio de la frustración, gracias por los momentos duros que han fortalecido nuestro espíritu al mismo tiempo que has mostrado cuán grande es tu misericordia, gracias por la riqueza y gracias por que en la necesidad sabemos que contamos contigo, gracias por cada sueño cumplido, gracias por los que aún están en proceso de realizarse y más aún gracias por los que no se cumplieron pues tenías cosas mejores para nosotros, gracias por que por cada porción que te pedimos siempre tienes el doble que darnos, gracias de corazón, gracias en todo y por todo. ¿Alguna vez te has escuchado orando?, si lo has hecho te darías cuenta que la mayoría de palabras que usas son para PEDIR.
Oraciones como: “Señor te pido que…”, “Dios mío por favor has…”, “Padre ayúdame a….”, “Señor dame…”, “Dios mío cumple…”, etc. Casi siempre no hay frase que no vaya con la intención de pedir algo en especifico y muy pocas veces oramos solo para agradecer a Dios lo que ya nos ha dado.
La mayoría de nosotros siempre esperamos que Dios nos de y nos siga dando, pero pocas veces estamos dispuestos a dar nosotros a Él.
Este día quiero invitarte a no pedir absolutamente nada, aun cuando tengas una enorme necesidad de pedirte o que cumpla algo en especifico. ¡Hoy no!, no pidas, solo agradece, dile al Sr:
Dios mío te doy gracias por mi familia…
Señor te agradezco por la vida que me regalas…
Padre gracias por el privilegio que me das de servirte…
Dios Santo, te agradezco por cada persona que me permitiste conocer este año…
Te doy gracias Señor por tu provisión porque hasta aquí nada me falto, siempre me diste lo NECESARIO.
Te agradezco Padre porque me diste salud y también le diste salud a mi familia…
Te doy gracias por las veces que me ayudaste y respondiste aunque en algunas ocasiones dude que lo hicieras…
Te agradezco Señor por aquellos momentos de dificultad los cuales me enseñaron a confiar más en ti y a crecer espiritualmente…
Dios mío te doy gracias por cada experiencia vivida, ya que de ellas pude aprender algo bueno…
Te doy gracias por cada persona que este año leyó alguna línea de las que me permitiste escribir…
Te doy gracias por tu amor, tu fidelidad, tu misericordia hacia mi vida, por tu gracias derramada en mi, por todo lo que haces sin yo merecerlo y por lo que me das aunque no haga merito alguno para obtenerlo…
CDD TU CASA SAN ANTONIO OESTE (Mensaje 28/12/22)