Toma de Decisiones – MATEO 7:24-27 ¿Qué hacemos con lo que Jesús dice?
¿Qué decisiones toma el cerebro?
El cerebro fundamentalmente toma decisiones que nos ayudan a sobrevivir, a adaptarnos, a crecer, a evolucionar y a alcanzar nuestra plenitud, igual que el árbol debe tener sistemas que le ayuden a adaptarse y a crecer para ser el tipo de árbol que puede llegar a ser.
¿Cómo funciona el cerebro a la hora de tomar decisiones?
“Tomar una decisión requiere hacer varios cálculos. El cerebro siempre trata de ahorrar la máxima energía y la manera en la que lo hace es restringiendo el número de conexiones neuronales necesarias para desempeñar con éxito una tarea, cualquiera que sea
¿Qué es la toma de decisiones y ejemplos?
La toma de decisiones es el proceso mediante el cual se realiza una elección entre diferentes opciones o formas posibles para resolver diferentes situaciones en la vida en diferentes contextos: empresarial, laboral, económico, familiar, personal, social, etc.
¿Qué es más importante en la toma de decisiones la razón o el sentimiento?
Según algunos especialistas en neurociencias, tomamos la mayor parte de nuestras decisiones guiados por el sistema límbico, donde residen las emociones, y luego las justificamos mediante la razón.
El evangelio según Mateo, registra la historia de dos hombres que necesitan construir sus casas, uno de los hombres en esta historia construye su casa sobre arena lo cual resultó siendo una mala decisión, ya que la arena no es un fundamento sólido, pero el otro hombre decidió construir su casa sobre una roca. A primera vista, estos hombres pueden parecer muy diferentes pero tienen varias cosas en común: lo primero es que ambos querían construir sus casas y lo segundo es que la tormenta vino para los dos.
Las casas en esta parábola, representan la vida y, tú y yo al igual que estos hombres, estamos edificando nuestras vidas. La tormenta vino para ambos y de la misma manera, por mucho que intentemos hacer las cosas de manera íntegra y evitar la dificultad, por el mero hecho de vivir en un mundo caído, habrá tormentas en nuestras vidas que traerán consigo dificultades, dolores y pérdidas. Lo importante, es que cuando vengan esas tormentas, podamos estar firmes con la cabeza en alto y con los pies anclados. En esta parábola, aunque vino la tormenta, el hombre que construyó sobre la roca no tuvo nada que temer.
¿Cuál es la roca sobre la que construyó el hombre prudente? La clave está en el versículo 24 del capítulo 7 de Mateo. El pasaje da por hecho que ambos hombres escucharon las palabras de Jesús, la diferencia es, qué hizo el hombre prudente con estas palabras. ¿Qué nos dice esto a nosotros? Que el secreto para edificar una vida firme e inamovible no está solamente en asistir a una congregación y escuchar un buen sermón, ni siquiera está en que leamos de manera diaria la Palabra. Al fin y al cabo ambos hombres habían escuchado lo que dijo Jesús. La clave está, en qué vamos a hacer con estas palabras que escuchamos y leemos. ¿Cómo vamos a tomar decisiones en nuestra vida para edificar sobre ellas?
Isaías, nos habla acerca de cuál debería ser nuestra actitud ante la Palabra de Dios. No sé tú, pero yo he sido culpable, de leer por encima las palabras de Jesús más de una vez, sin dejar que afecten mi comportamiento y sin permitir que echen raíz en mí, pero la actitud correcta debería de ser: detenernos, temblar con reverencia ante su Palabra y dejar que forje nuestro caminar diario.
En esta parábola, Jesús contrapone por un lado a la persona que oye sus palabras y las hace Vs 24 y por otra parte está el que oye las palabras y no las hace. Vs 26. Luego ilustra el marcado contraste entre el sabio que edificó su casa sobre la roca y el necio que edificó su casa sobre la arena.
A simple vista nos sería muy difícil notar la diferencia entre ambas edificaciones. Porque la diferencia está en los cimientos, y los cimientos no se ven. Solamente cuando una tormenta arremetió con ferocidad sobre las casas reveló su verdadero fundamento. La que estaba fundada sobre la roca permaneció, en cambio la que había sido construida sobre el débil fundamento de la arena se derrumbó y fue grande su ruina. Vs 27.
Y de la misma manera suceden con los que dicen ser cristianos. Con frecuencia lucen semejantes y es muy difícil distinguir quien lo es y quien no lo es. Ambos parecen estar construyendo vidas cristianas: leen la Biblia, van a la iglesia, escuchan sermones y compran buena literatura cristiana.
Pero, la razón principal por la que no se puede descifrar qué diferencia hay entre ellos es porque los cimientos de sus vidas están ocultos. Solamente las pruebas de la vida los podrán revelar. ¡Solo una tormenta revelará la verdad!
A menudo, una tormenta de crisis colocará en manifiesto que clase de creyentes somos: muchos se alejan de Dios, otros reniegan de lo que viven; porque la verdadera espiritualidad de la falsa no se podrá distinguir hasta que llega la hora de la prueba.
Para reflexionar: La cuestión central del mensaje de Cristo no es si oyen su enseñanza. Sino si hacen lo que oyen. Jesús no espera que tú solamente digas palabras lindas y entusiastas sobre Él, ni tampoco que oigas sus palabras estudiándolas y tratándolas de memorizar; en cambio, lo que Él espera es que hagas lo que dices y sabes porque eso te va a garantizar permanecer junto a Él cuando llegue la hora de la prueba.
¿Sobre qué estás fundamentando tú vida? ¿Qué situaciones han revelado el fundamento de tú vida?
CDD TU CASA SAN ANTONIO OESTE
PR. HORACIO ALFONSO LEON