Calles Godoy Cruz y Pedro García, San Antonio Oeste, Argentina
+54 9 293 446 0311
cddtucasasao@gmail.com

Una Fe imperfecta

Iglesia Cristiana Evangélica

UNA FE IMPERFECTA  Mateo 20-30

Aquí tenemos la historia de dos hombres que encontraron el camino al milagro. Historia muy significativa, porque pinta el espíritu y la disposición de mente y corazón a los que se abren los dones más preciosos de Dios.

(1) Estos dos ciegos estaban esperando, y cuando se les presentó la oportunidad, la agarraron sin dudarlo. Sin duda habían oído acerca de las maravillosas obras de Jesús; sin duda se habían preguntado si ese poder podría alcanzarlos también a ellos. Jesús iba pasando por allí. Si Le hubieran dejado pasar de largo, su oportunidad habría pasado para siempre; pero, cuando se les presentó, no dudaron en intentarlo.

   Cuando Pablo acababa de predicar en el Areópago, algunos le dijeron: “Ya te oiremos acerca de eso otra vez” Aplazaron la cuestión hasta momento más conveniente, pero no llegó, como muchas veces.

   (2) Estos dos ciegos eran indesanimables. La gente les decía que dejaran de gritar, que estaban haciendo el ridículo. Era la costumbre de Palestina que un rabino enseñara mientras iba de camino; y sin duda los que estaban alrededor de Jesús no podían oírle por el griterío que armaban los ciegos. Pero no se podía conseguir que se callaran; para ellos la cuestión era ver o no ver, y nada los iba a detener. A menudo sucede que nos desanimamos muy fácilmente al buscar la presencia de Dios.

   (3) Estos dos ciegos tenían fe imperfecta, pero estaban decididos a ponerla en acción. Se dirigieron a Jesús como Hijo de David. Quería decir que creían que Jesús era el Mesías, pero Era una fe imperfecta, que los movía; y Jesús la aceptó. Si se tiene fe, Jesús la acepta.

   (4) A estos dos ciegos no les daba miedo presentar petición. Eran pordioseros, pero ERA no dinero lo que pedían, ni nada menos que la vista. Ninguna petición es demasiado grande para Jesús.

   (5) fueron agradecidos. Cuando recibieron lo que anhelaban, no se marcharon y se olvidaron de Jesús, sino Le siguieron. Tanta gente, en las cosas materiales como espirituales, reciben lo que desean, y luego se olvidan hasta de dar las gracias. La ingratitud es muy triste ante Dios Estos ciegos recibieron de Jesús la vista, y Le dieron su agradecida lealtad. Nunca podremos pagar a Dios todo lo que ha hecho por nosotros; pero por lo menos podemos estarle agradecidos. El gran secreto de la victoria es no mirar hacia atrás, por más que el pasado haya sido bueno, demos pasos hacia adelante.

    No seas conformista con tu situación, pide ayuda a Dios y a los que el ponga en tu camino. V 30 “Y dos ciegos que estaban sentados junto al camino, cuando oyeron que Jesús pasaba, clamaron, diciendo: ¡Señor, Hijo de David, ten misericordia de nosotros!”

  Da un paso más allá, no te fijes en los demás. Así parezca que nunca lo alcanzaras. V 29 “Al salir ellos de Jericó, le seguía una gran multitud.” A ellos no les importo que hubiera mucha gente

    Si fallaste vuelve a intentarlo. Los hombres que consiguieron grandes cosas no lo lograron de la noche a la mañana, lo intentaron una y otra vez. Arriésgate no tengas miedo, date otra oportunidad de amar  o en el trabajo en el estudio, en la empresa en la iglesia, Etc.

    No dejes que tu pasado te detenga, con Jesucristo somos nuevas criaturas, ya todo lo viejo paso, ahora solo tenemos un bello presente y un magnifico futuro.

   Recuerda que el tiempo pasa y que la oportunidad que Dios te está dando hoy tal vez nunca la vuelvas a tener.

   La única forma de nunca detenernos y seguir adelante es si sabemos que es lo que queremos, debemos tener meta y propósito claro. V 32 “Y deteniéndose Jesús, los llamó, y les dijo: ¿Qué queréis que os haga?”

   No escuches a los que té quieren detener. V 31 “Y la gente les reprendió para que callasen;” hay una pequeña historia que nos puede servir para esta reflexión: Un grupo de ranas viajaba por el bosque, cuando de repente dos de ellas cayeron en un pozo profundo. Las demás se reunieron alrededor del agujero y, cuando vieron lo hondo que era, le dijeron a las caídas que, para efectos prácticos debían darse por muertas. Sin embargo, ellas seguían tratando de salir del hoyo con todas sus fuerzas Las otras les decían que esos esfuerzos serían inútiles

   Finalmente, una de las ranas atendió a lo que las demás decían, se dio vencida y murió. La otra continuó saltando con tanto esfuerzo como le era posible. La multitud de ranas le gritaba que era inútil pero la rana seguía saltando, cada vez con más fuerza, hasta que finalmente salió del hoyo. Las otras le preguntaron: ¿No escuchabas lo que te decíamos? La ranita les explicó que era sorda, y creía que las demás la estaban animando desde el borde a esforzarse más y más para salir del hueco.

   No te desanimes sigue intentando. V 31 b “pero ellos clamaban más, diciendo: ¡Señor, Hijo de David, ten misericordia de nosotros!” es fácil echarse a morir cuando se tiene problemas, lo difícil y grandiosos es decidir que hay que seguir luchando.

   Se firme en lo que quieres no dejes que las circunstancias cambien lo que tanto anhelas. V 33 “Ellos le dijeron: Señor, que sean abiertos nuestros ojos.”  Si no te detienes al final encontraras lo que tanto quieres. V 34 “Entonces Jesús, compadecido, les tocó los ojos, y en seguida recibieron la vista; y le siguieron.” Si te equivocas, no te detengas, sigue delante y triunfarás. La meta está más cerca de lo que tú crees.

 

CDD TU CASA SAN ANTONIO OESTE (mensaje dia domingo 19/03/23

 

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

error: Contenido Protegido !!